Parte del valor del que disfrutas cuando compras o vendes en StockX es nuestro proceso de verificación que tiene lugar en nuestros Centros de verificación. StockX sigue unas instrucciones internas rigurosas para asegurarse de que todo lo que está incluido en el sitio cumple nuestros estándares. Este compromiso con la calidad es uno de los motivos por los que puedes sentirte más a gusto comprando y vendiendo en StockX porque sabes que tu artículo está en buenas manos.

 

Para los compradores, el proceso de verificación significa que tu artículo llegará en perfectas condiciones y que ha sido inspeccionado de manera independiente para ver si tiene cualquier tipo de desperfecto o alteración antes de que te llegue.

 

Para los vendedores, el proceso de verificación marca el fin de tu transacción con el comprador y el cobro de tu dinero, y permite dejar en nuestras manos los aspectos relacionados con el servicio de la transacción para que así tú puedas dedicarte a seguir vendiendo. Cuando vendes en StockX, el proceso de verificación te permite centrarte en tu transacción mientras nosotros nos encargamos de la logística.